Quilmes no es sólo ruinas. A pocos km de la Ciudad Sagrada existe un extraordinario monumento natural llamado por los quilmeños "El Socavon". 

Se trata de un extraño arco de piedra de unos 4 metros de altura por 6 de ancho. De lejos parece una enorme boca de una cueva, en donde los relatos populares sitúan a la antigua Salamanca del Socavón. La vista desde allí es fascinante! y la imaginación no puede más que dejarse llevar por el escenario y pensar en los distintos rituales que habrán practicado allí los antiguos Quilmes.

Si te animás a conocer este extraño lugar, la propuesa es la siguiente: te paso a buscar por tu alojamiento y te llevo rumbo al Rincón de Quilmes. Tras un viaje de unos 30 minutos en camioneta nos encontraremos con Rubén, el guía quilmeño quien nos llevará por el lecho de un río seco. Caminaremos por este lecho durante aproximadamene 1 km lo que nos tomará algo así como 1 hora, ya que partiremos desde los los 2200 metros de altitud hasta los 2350 metros.

Una vez dentro del socavón Rubén compartirá con nosotros lo que sabe de la historia de este lugar mágico.

Luego nos queda retornar en busca del vehículo y allí es donde puede comenzar otra experiencia única denominada Turismo Rural Comunitario

En qué consiste esta propuesta?: en vez de regresar dirctamente a tu alojamiento recorremos unos 2 km de un tortuoso camino y llegamos al puesto de Doña Martina Yapura quien se dedica a la crianza de cabras y cultivar hortalizas desde que era pequeña. Hoy ella se ofrece a ser tu anfitriona y poder compartir parte de su vida cotidiana y participar en algunas de ellas.

Podés elegir tener sólo un contacto breve y merendar, al morzar o cenar. O podés animarte a una experiencia de verdadero intercambio e inmersión cultural y quedarte a dormir una o dos noches en su casa...lo que tu necesidad espiritual y curiosidad deseen. Pensalo y lo conversamos.