"Nada es para siempre” dice una frase y la geología de Amaicha te hace entender esto claramente. De julio a septiembre  de cada año en Amaicha afloran Las Salinas.  Y es que hace millones de años Amaicha estuvo bajo el mar, hasta que el levantamiento andino nos llevó a los 2000 metros de altura.

De esas épocas nos quedó una zona de aproximadamente 900 hectáreas en donde existe dos hoyas fruto de la fractura de la tierra y la erosión que causa el agua y el viento, en donde anualmente aflora la sal de ese antiguo fondo marino y se encuentran restos  de moluscos fósiles. Todo ello enmarcado por cientos de lomas de colores rojizas, pardo verdosas y violáceas, que hacen que caminar por allí sea una experiencia liminal. Si te gustan los videos acá poder ver uno al respecto.

Si te interesan los paisajes desérticos y vivir una experiencia de aventura te propongo recorrer juntos la Cuesta de Las Salinas.

La propuesta es simple: te paso a buscar por donde te alojes y te acerco hasta El Remate. Allí dejamos la camioneta e iniciamos  (punto 1 del mapa de abajo) una caminata de dificultad media, de aproximadamente 1,5 horas que nos lleva hasta el nacimiento del río de la Salinas (punto 2 del mapa de abajo). Desde allí se tiene una espectacular vista panorámica de las Salinas y las lomas de colores.  Caminamos por la Cuesta de las Salinas (punto 2 a 3 del mapa de abajo), la antigua senda por donde circulaban los arrieros a caballo en busca de la sal. Nos detendremos a lo largo del camino a sacar fotos y admirar el espléndido paisaje lunar fruto de cientos de millones de años de evolución geológica.  

De regreso te llevo de nuevo hasta tu lugar de origen. Son unos 5 km de caminata entre ida y vuelta. 

Precio $ 30.000

Duración: 3 a 4 horas

Nota:  El precio es por grupo de hasta 4 personas.

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